La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) es un organismo especializado del Sistema de las Naciones Unidas (ONU) con sede en París y delegaciones en diferentes países.
El patrimonio cultural no se limita a monumentos y colecciones de objetos, sino que comprende también tradiciones o expresiones vivas heredadas de nuestros antepasados y transmitidas a nuestros descendientes, la UNESCO considera que el proceso de elaboración de ciertos platos elaborados y cocinados y las prácticas culinarias deben preservarse para la posteridad y promover su promoción internacional.
Por ese motivo, cada año elabora una lista de tradiciones gastronómicas de diversas partes del mundo que conforman la Lista del Patrimonio Cultural Inmaterial, en la que no es el plato o manjar lo que se considera como tal, sino la «práctica, el ritual, la costumbre para su elaboración y el arte para su preparación».
Coincidiendo con el pasado día 20, el día mundial de la Paella el diputado José María Chiquillo ha impulsado una Proposición No de Ley (PNL) ante la Comisión de Cultura del Congreso de los Diputados para conseguir la Declaración de la Paella Valenciana como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad e incluirla en la Lista Representativa de la UNESCO.
En opinión del diputado popular “la Paella Valenciana merece ese reconocimiento internacional, es una seña de identidad de los valencianos y proyecta internacionalmente la marca de calidad y excelencia de la Comunidad Valenciana”.
La Paella Valenciana constituye uno de los Patrimonios imprescindibles de la gastronomía de la Comunidad Valenciana, tiene su día, tiene su emoji, y dentro de poco puede que además sea oficialmente Patrimonio de la Humanidad.